La ansiedad es un mecanismo de alerta natural del cuerpo. Una reacción propia de un organismo sano, por muy incómoda o malestar nos genere.
De manera parecida a la fiebre, que tu cuerpo crea cuando hay una infección u otro tipo de problema para indicarte que algo no va bien (o consideras que puede no ir bien), tu cuerpo genera ansiedad.
Si tu sistema de alerta no se activa cuando algo va mal en tu vida, las cosas te van a ir mal. Si tu sistema de alerta, está siempre activado, es que algo, tampoco va bien.
Claro que no se puede vivir con ansiedad y habrá que ver la forma de que puedas manejarla pero, sobre todo, tenemos que oír su origen y ante qué amenaza se está activando: te mantienes en algo en tu vida que realmente no estás eligiendo y te sientes atrapado, que te sientes responsable de todo y de todos, que estás llevando un ritmo de obligaciones y esfuerzos demasiado alto, hay alguna amenaza para ti o para aquello que consideras importante…
Aunque muchos psicólogos hablan, a mi entender, de forma errónea de «control» de la ansiedad, para mi, el objetivo es disminuir tu ansiedad, pero no a través del control, sino a través de ir al motivo por le que se activa esa alerta. Al solucionarlo y de forma automática disminuirá tu ansiedad, porque ¿para qué iba a crear tu cuerpo una alerta si no hay una amenaza? Además, quitar la ansiedad sin ir al motivo que la genera, es como tener una infección y tomar una pastilla que quite la fiebre, sin curar la infección: puede pasar momentáneamente. Pero como algo la causa, simplemente, volverá y, posiblemente esa infección vaya a peor.
De la misma forma que un cuerpo sano no genera fiebre, un psiquismo no genera ansiedad. Por eso hay que abordarlo de forma que no sólo ayudemos a disminuirla, sino sobre todo a ir al por qué se genera: a ver qué es lo que no está yendo bien en tu vida.
Si te encaja esta perspectiva y enfoque de los problemas con la ansiedad y quieres que te ayude a entenderla y manejarla de forma eficaz puedo atenderte como Psicólogo en Marbella, Granada y Online.
